Lo maravilloso de Richie no son solamente las millones y millones de películas que se vio, volvió a mirar, analizó, criticó y volvió a mirar sino que con su espíritu de fanático compulsivo se enfrenta a las grandes figuras de la pantalla grande como si las conociese de toda la vida. Einsenstein, Leni Riefenstahl, Marilyn Monroe, la Coca Sarli y Armando Bó (h) parecen venir al estudio con él a dejarse disputar.
Lo que nos encanta de Richie es que después de hablarnos del mundo de las estrellas que tanto se codean con él nos deja bajar a la tierra y nos recomienda las películas que podemos ver en la tele esta semana, revista del cable en mano y toda subrrayada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario